Jan Pere


La empatía

Empatia

La empatía es una forma de amor desapegado.

Hay dos formas de vivir la vida, una es desconectado, encerrándote en tu burbuja de seguridad y la otra es con empatía, conectado con los demás. Estar conectado tiene sus riesgos, como bien sabes, pero es necesario si te quieres relacionar con el mundo y la realidad.

 

Hay dos formas de relacionarse:

La primera es inconsciente y reactiva (estímulo-respuesta) y te puede caer la del pulpo, porque no controlas que entra y sale de ti

La segunda es consciente (estímulo-reflexión-respuesta) se rige con inteligencia espiritual, y sabes cuándo te puedes acercar o alejar.

 

Veamos dos ejemplos:

Cuando vas por el mundo en plan empático sin ser consciente de ello, te suceden cosas que tú consideras normal: los cambios de humor, inquietud, negatividad, dolor y malestar súbitos sin explicación aparente.

Es como cuando estás bien y te encuentras con un amigo o conocido y te cuenta sus penas o lo mal que le va. Y sí, el mundo es injusto y mil cosas más.

Cuando por fin sigues tu marcha, si estás atento, te darás cuenta de que algo cambio en ti. Y que ahora tienes sensaciones o pensamientos extraños donde antes había normalidad.

Si no eres sensible, sentirás como algo denso y pegajoso cayó sobre ti y el día se vuelve gris, o negro. Y donde antes había suavidad, ahora sientes tensión, y si no sabes qué hacer te puedes mantener así hasta la noche e incluso un poco más.

Esto se debe a que tus neuronas espejo se activaron en la dirección equivocada, (empatía inconsciente) y mientras no las dirijas con tu atención e inteligencia espiritual (empatía consciente) hacia algo mejor seguirás con esa desagradable sensación de negatividad y malestar.

Cuando tu empatía es consciente el proceso que se desarrolla es diferente, veamos: vas por el mundo con tu darte cuenta activo, sintiéndote bien.

 

Es un día agradable y estás de buen humor.

Te encuentras con el conocido o amigo en problemas y te cuenta sus males con todo lujo de detalles.

Le escuchas, le atiendes y cuando por fin sigue su marcha, no sabe por qué, pero se siente mejor, de pronto su oscuridad se ha comenzado a disipar y una chispa de esperanza se expande en su vida.

El día para él, cambio para bien.

Sigues tu camino y continúas sintiéndote bien, es más, algo dentro ti comenzó a irradiar felicidad, bienestar, paz porque al escucharle de alguna forma le ayudaste a salir de su nube de negatividad.

El día sigue avanzando y tú continúas en tu estado de armonía y bienestar. Las neuronas espejo volvieron a actuar, pero esta vez las dirigiste con tú. Al mantener tu atención enfocada con inteligencia espiritual en tu estado de bienestar fueron las neuronas de tu amigo las que aprendieron de ti

Y ahora vienen las preguntas: qué paso en el primero y el segundo, por qué tanta diferencia, cuál es el factor que la marcó.

 

Tu atención.

En ambos casos centraste la atención en  el amigo.

En el primero, sin darte cuenta y te impregnaste de él. Sí, los estados internos son pegadizos y los negativos muy pegajosos.

En el segundo te mantuviste en tu estado interno porque al contrario del caso anterior eras consciente de él y supiste mantener la emociones de esa persona fuera de ti (activaste tu corta fuegos emocional), actuando con inteligencia espiritual, bueno para ti y bueno para él.

 

Explorando la empatía

Si te preguntas ¿Qué es la empatía?

Es la habilidad de una persona para calzar los zapatos del otro. O lo que es igual entrar en sintonía con el entorno interior de otra persona, y sentir su estado interno. Esto no requiere que lo comprendas, es algo que te sucede cuando sientes simpatía y resonancia con la otra persona.

Es como cuando ves una película y sientes simpatía por un actor, lo que le sucede a él en la pantalla, te resuena a ti como si fuera real. O cuando tu equipo favorito marca o gana el partido, sientes como si lo hubieras marcado y ganado tú.

La empatía también puede ser grupal y las grandes compañías lo saben y lo utilizan para fidelizarte a su marca, los de la “manzanita”, entre otras, son un claro ejemplo de cómo usan la empatía a su favor.

Esta es la empatía oscura. Y pueden usarla tanto personas como entidades u organizaciones. Usan la empatía para seducir a los demás mostrando interés o haciéndote sentir especial, cuando lo único que quieren es conocer al otro para manipularle y conseguir algo de él.

 

Cómo funciona

La gran diferencia es cuando la persona está atenta y consciente de sí misma, de cómo fluyen las emociones y pensamientos en la otra persona. Al saberlo distinguir como ajeno a ella, no los toma y los deja pasar.

Tu cortafuego emocional es: mantenerte neutral, observando sin juzgar. Y desde ahí, gestionas tu empatía, acercándote o alejándote, según tu necesidad, sin impregnarte del estado interno de la otra parte. De esta forma la puedes comprender y modular la influencia del entorno externo (esa persona lo es) y atenderle sin enfangarte en sus emociones, manteniendo la armonía de su entorno interior.

 

¿Cómo estar despierto y neutral?

Activar la magia que hay en ti es un proceso sencillo y complejo a la vez, porque son muchas cosas cotidianas, pequeñas pero importantes, y en la vida real suceden todas a la vez.

Comencemos por la esencial:

Parte 1— El cuerpo, en él reside todo el poder.

Si no estás en contacto con tu cuerpo, no hay nada que hacer, funcionas como un fantasma y en cierta forma lo eres porque no tienes presencia real. Para que nos entendamos, tu cuerpo físico está aquí, pero todo lo demás no.

Y sin presencia no hay identidad, ni sabiduría interior, ni inteligencia espiritual.

 

Parte 2— El discurso interno.

Es la más compleja, consiste en escuchar el discurso de la otra persona, si quedarte con él.

Y ¿Eso cómo se hace?

Pon tu atención en lo que ves y observa (corta fuego). Date cuenta de cómo habla, se mueve y gesticula, no le imites, si no las neuronas espejo se activarán y no es plan. De esta manera le escuchas y comprendes, pero no dejas que eso forme parte de ti.

Si le dejas entrar en tu interior es como si te hechizaran, y es más difícil neutralizarlo y echarlo fuera que no dejarle entrar.

La dinámica del hechizo.

Cuando hablamos de hechizo te imaginas algo extraño y sobre natural y no es así, son palabras y gestos cargados con ignorancia o maldad que impactan en tu entorno interior generándote confusión y malestar. Y por fortuna cuando la influencia es positiva, también de bienestar y bondad.

 

Parte 3— El gran secreto, la respiración

El secreto de la vida y tu poder personal es la respiración, porque es tu relación entre lo físico y lo sutil.

Esta es clave, respirar, es muy importante para mantener tu poder personal dentro de ti, sí, acordarte de mantener tu propio ritmo respiratorio te inmuniza a la influencia exterior. Pero si te sintonizas a nivel respiratorio con la otra parte, ¡la cagaste, ya te entro!

Los grandes manipuladores lo saben y lo usan todo el tiempo para tener poder sobre ti. Es algo tan sutil como poderoso, no te da cuenta de pronto sin saber cómo, lo tienes en tu interior.

Si te agarró y comenzaste a respirar en sintonía con la otra persona, no pasa nada. Deja de respirar unos segundos, esto rompe el bucle, y recupera tu propia respiración, cuando la restableces comienzas a sentir con claridad, obsérvate y siente como su negrura emocional se disipa y aleja de ti.

Esto es inteligente, porque te aporta una distancia de seguridad que te permite atender mejor a esa persona y a la vez que sientes su estado interno, te mantienes en el tuyo, por eso le puedes impregnar de tu propio magnetismo positivo, y no al contrario.

 

Parte 4 No juzgues.

La otra parte siempre quiere oír tu opinión, porque cuando opinas te impregnas de ella. Al opinar de alguna manera estás juzgando y tomando parte metiéndote en su mundo.

¿Cómo evitar hacerlo?

Evita los adjetivos y presta atención a los verbos. (Salir de la opinión para pasar a la acción) Es una forma de romper los hechizos con la magia de la realidad.

Un recurso útil es observarte mientras escuchas o hablas, manteniendo tu atención enfocada en lo que haces sin discurso interno. Esto impide que tus neuronas espejo se pongan tontas y comiencen a reflejar, porque tu atención está en ti y no en él.

 

Parte 5 Se compasivo.

Sentir compasión por la otra persona, que no pena, es una forma de emitir amor desinteresado hacia los demás.

En la compasión hay amor, un sentimiento. En la pena aflicción que es una emoción, con juicio y comparación. He aquí una gran diferencia.

La compasión es un sentimiento y asentado en el corazón, 7º nivel evolutivo y el 4º chakra, el Anahata.

El juicio y la comparación se deslizan con facilidad hacia la mente negativa y desde ahí a las emociones más básicas como el miedo o el temor.

Seguro que a ti tampoco te gusta que te juzguen o comparen porque siempre es una limitación. Pero si, que te gusta que te reconozcan y traten con respeto. Entonces haz igual.

 

Parte 6 Agradece.

Sí, agradeces por estar despierto y darte cuenta cada vez verás más porque agradecer es como un entrenamiento.

Saber ver es una gran ventaja, porque te permite acercarte o alejarte según tu necesidad. Esto marca una diferencia a tu favor, porque la gente suele mirar, pero no siempre ve.

Es importante que sepas hacerlo (ser compasivo y gestionar tu empatía) no presupone que tengas que estar salvando a todo el mundo. ¡Acabarás agotado!

Recuerda la responsabilidad, es solo contigo mismo, mantener la armonía en tu entorno interior. Y si te piden ayuda desde el entorno cercano, acuérdate de mantener el equilibrio interior – exterior y la distancia adecuada para ti.

 

Resumen

Si practicas la empatía compasiva, no solo enriquecerás tu vida y la de tu entorno, además será como una onda expansiva de luz que llegará a los demás.

¡No esperes, hazlo ya! Porque estas palabras sin la práctica, son como polvo en el viento.

Observa y aprende. En esto reside el secreto, estar abierto a otras formas, nunca tenemos toda la verdad. Entender esto es ser sabio y usar tu inteligencia espiritual, más.

Mantén tu actitud de curiosidad y descubrirás que la vida es el verdadero máster existencial, un filón para tu aprendizaje, aprovéchalo, disfruta y agradece por ello.

Jan Pere

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Imágenes: www.pixabay.com

Y si quieres saber más sobre cómo relacionarte y tu influencia en el entorno, el libro: La sabiduría interior te dará pistas sobre ti y cómo conocerte mejor. Recuerda que tu estado interno, crea por resonancia el externo. Cuanto más sepas de ti y tu funcionamiento interior, más fácil te será conectar con  empatía de forma natural.

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